ORDEN DEL TEXTO DEL CORÁN

El árabe era la lengua común a toda la península Arábiga. Y, como es obvio en las diferentes regiones y tribus, se configuraban dialectos.
El Profeta Muhammad, por lo tanto, recibió la revelación en la lengua árabe que hablaban los Bani Quraish de la Meca. Los neófitos, al principio, para facilitar la comprensión y propagación de la Fe Islámica recitaban el Corán con sus dialectos respectivos. Pero, con la propagación del Islam, más allá de las regiones de lengua árabe, la lengua árabe fue ganando terreno, y para evitar equívocos y tergiversaciones, el Califa Othman, en previa consulta con los compañeros del Profeta, decidió que las copias auténticas del Corán recopiladas por Abou Baker deberían ser las únicas válidas - por ser el texto fiel de la revelación - en la totalidad del Mundo Musulmán.

Las diferentes maneras de recitar el Corán:

Consideramos, a continuación las diferentes maneras de recitar el Corán.

1) La escritura árabe utilizada por los amanuenses del Profeta no tenía ni puntos ni vocales. El mismo tipo de escritura fue empleado en la compilación escrita por Zaid, bajo el califato de Abou Baker y en los ejemplares distribuidos por el Califa Othman.

2) Aunque el Corán fidedignamente recopilada, copiado y salvaguardado, debido al analfabetismo reinante - en los inicios de la predica - su propagación se realizaba por vía oral. Los árabes cultos no tenían dificultades para leerlo. Pero había miles de creyentes que habían aprendido el Corán de memoria oyendo al Profeta y a sus compañeros recitarlos. Y así siguieron recitándolo y así lo transmitían a otros musulmanes.

3) Othman, no sólo envió un ejemplar del Corán auténtico a cada región del Mundo Islámico; sino que, para preservar su lectura correcta, envió un lector "Qari" (4) a cada región, para difundir la correcta recitación enseñada por el Profeta mismo.

4) Con el tiempo se consiguió la necesidad del uso de vocales y una puntuación pertinente para la preservación de una correcta lectura del Corán.
Así pues, fue a instancia de Zaid (45 a 53 D. Hj.) que se Fijaron los vocales y la puntuación. Después, durante el califato de Abdel Malek (65 a 85 D. Hj.), Hadjadj-BinYusuf, algunos fueron encargados de asignar nuevos signos para la puntuación. Y vocales para una absoluta claridad que preservaría y facilitaría su lectura
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Consiguientemente, después de lo antedicho, es evidente que la recitación del Corán (con las pocas variantes sin importancia) es la misma que realizaba y enseñaban al Profeta. Ello es afirmado unánimemente por todos los eruditos y recitadores (5) del Corán que consideran que sólo esta recitación del texto del Corán es la auténtica.

a) Coincide con el texto de las copias distribuidas por el Califa Othman.
b) Se ajusta al léxico árabe, a sus usos su idioma y gramática.
c) Es absolutamente fiel a la Revelación como ya lo probamos. Por ello es que hay tan sólo unas pocas variantes en su interpretación y estas no se contradicen en sus significados, sino que los hacen más vastos y más amplios. No cabe, pues, ninguna duda en lo referente a la recitación del Corán. No hay duda de que el Profeta practicaba estos distintos modos de recitación en las pocas variantes que hoy existen, y que éstas también hacen los significados más amplios.

Como ejemplos consideraremos las dos auténticas interpretaciones de:

a) el versículo 3 de la Sura "Al Fatiha" (apertura)
b) el versículo 6 de la Sura "Al Maida- (La Mesa Servida).
Una lectura de "Al Fatiha" (apertura), ósea, la Sura 1, versículo 3 es:
Que significa - El Señor del Día del Juicio" y la otra es:
Esta interpretación significa: "El Soberano del Día del Juicio".
Obviamente ambas interpretaciones hacen el significado del versículo entero más claro.
Una interpretación de la Sura 5 versículo 6 es:
Significa "Lavad vuestros rostros..., y (lavad) vuestros pies" como se hace en el momento de realizar las abluciones con los pies descalzos.

La segunda interpretación es:

Significa: Lavad vuestros rostros y enjuagad vuestras cabezas y (enjuagad) vuestros pies, con las manos mojadas. La segunda interpretación hace referencia a la ablución de los pies, conservando los calcetines siempre que haya una ablución completa previa.
Esta concesión es válida durante 24 horas en casa y durante setenta y dos horas estando de viaje. Es obvio que en las diferentes interpretaciones de estos dos ejemplos, no hay contradicción de esencia en absoluto. Por otra parte, estos hacen el significado total más amplio. Y lo mismo sucede con todas las demás variantes de interpretación.